Álvaro Encinas, con Down, protagoniza una fotografía premiada por «desafiar prejuicios» al mostrarle en un rol activo y productivo

Álvaro Encinas tiene 24 años y es el protagonista de la instantánea ganadora del tercer galardón del XXI Concurso Internacional de Fotografía ‘Las personas con discapacidad en la vida cotidiana’, impulsado por el Instituto Universitario de Integración en la Comunidad de la Universidad de Salamanca (Inico) y la Fundación Aliados por la Integración.

Bajo el lema ‘Las personas con discapacidad en la vida cotidiana’ este certamen reconoce aquellas fotografías que muestran a personas con discapacidad en su día a día.

La obra ‘Posibilidades, oportunidades y futuro’, que obtuvo el tercer premio, fue seleccionada entre más de 720 trabajos. Su autor, el responsable de comunicación de Down Sevilla, Alejandro Márquez, aseguró, en declaraciones a Servimedia, que eligió al joven sevillano porque “la fotografía centraba el foco en lo importante, que es la persona”.

Por su parte, Álvaro Encinas, reconoció a Servimedia “sentirse feliz” por el premio y especialmente “por la oportunidad de poder trabajar como dependiente en una tienda de ropa de cara al público”.

En la instantánea se puede ver al joven desempeñando una de sus principales funciones: organizando y colocando la ropa de la tienda. “Algo a lo que está acostumbrado”, según su madre, María Jesús, “ya que desde pequeñito le enseñé a doblar los calcetines y su ropa. Así que este empleo, que es su primer trabajo, le ha venido genial”, confesó.

El autor de la obra destacó “la enorme importancia del premio”. “Visibilizar el día a día de las personas con síndrome de Down nos hace cómplices en la construcción de un mañana que abrace la discapacidad”.

En opinión de los miembros del jurado, la imagen “desafía las expectativas y prejuicios” al mostrar a la persona en un rol activo y productivo. Además, destacó que “el punto de vista único, que captura al sujeto entre estantes de ropa, “simboliza la perspectiva a menudo oculta de las personas con discapacidad en el mundo laboral”, destacando cómo la luz contribuye a destacar la figura de Álvaro. Se subraya así “la dignidad y el valor de cada persona independientemente de sus capacidades físicas o cognitivas”, apuntó el jurado.

Por último, cabe señalar que el premio tiene un fin solidario y que los 1.000 euros de los que está dotado irán destinados a la Asociación Down Sevilla para “aportar un grano de arena en el trabajo por los derechos y el futuro del colectivo de personas con síndrome de Down de Sevilla”, concluyó Alejandro Márquez.